Nuestro organismo está constantemente expuesto a toxinas provenientes de todo lo que nos rodea. Acumulamos estas toxinas a través de la contaminación, el humo de cigarrillo, las medicinas, la comida chatarra, fertilizantes, cosméticos, las ondas microondas. Todas estas sustancias nocivas se deben eliminar a través de la orina, la mucosidad o el sudor.
Al estar tan expuestos a estos componentes la tarea del cuerpo se complica, la desintoxicación iónica es una alternativa para este riesgo. Esta terapia consiste en colocar los pies en una tina de agua y sal. Haciendo uso de la electrólisis se separan los componentes del agua creando iones. Aniones (con carga negativa) ingresan al cuerpo y eliminan iones de carga positiva que generan toxinas. Luego, mediante osmosis, estos iones salen del cuerpo.
Esta terapia se realiza en sesiones de 30 minutos y como resultado el agua en el que fueron sumergidos los pies adquiere un color oscuro por las grasas, residuos, metales y minerales que excreta el cuerpo. Los beneficios incluyen mayor energía, limpieza de la sangre, mejoramiento de la digestión, fortalecimiento del sistema inmunológico, control de alergias, entre otros.
La razón por la que se realiza a través de los pies es porque esta zona del cuerpo tiene una gran cantidad de poros y nervios que conectan a órganos vitales.
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